La percepción de un padre Afroamericano sobre el racismo y la crianza de los hijos

padre e hija paseando por el patio

Los recientes acontecimientos están resaltando la dura realidad del racismo en este país. Las horribles muertes de George Floyd, Ahmaud Arbery, Breonna Taylor y muchos más arrojan luz sobre la discriminación que experimentan las personas negras y morenas todos los días. Como escribió recientemente el activista y leyenda de la NBA Kareem Abdul-Jabbar: “El racismo en Estados Unidos es como polvo en el aire. Parece invisible, incluso si te estás ahogando con él, hasta que dejas entrar el sol. Entonces ves que está en todas partes”.

Como padre de la raza  negra, estoy profundamente consciente de que no importa cuánto proteja o cuánto luchemos por el cambio, mi hermosa hija algún día experimentará el racismo. Lo sé porque yo, como la mayoría de los hombres negros, he experimentado personalmente el racismo muchas veces. Ya sea que un vecino me llamara la palabra con “n” cuando tenía 7 años o que personas armadas me detuvieran en la universidad porque “encajaba con una descripción”, el racismo es real. Aceptar esa realidad y cómo algún día afectará a mi hija me rompe el corazón.

Lo que me ayuda a superar los momentos difíciles es tener el amor y el apoyo de familiares y amigos y entender claramente quién soy como persona. No todos los niños (o adultos) cuentan con el tipo de apoyo que necesitan para comenzar a superar el costo emocional de la discriminación. Todos necesitamos personas en nuestras vidas con las que podamos compartir nuestros sentimientos y que nos ayuden a recordar quiénes somos realmente, especialmente nuestros hijos.

Reconozco que la experiencia de todos con el racismo es única. Muchos de nosotros, sin embargo, estamos sintiendo ira, tristeza e incluso desesperanza en este momento. Y está bien sentirse así. Al mismo tiempo, es importante que les demos a nuestros hijos la oportunidad de expresar lo que sienten. Si bien no podemos "arreglar" sus sentimientos, podemos proporcionar un espacio seguro para que nuestros hijos compartan, aprendan y crezcan.

Como padre, no siempre me siento preparado para tener conversaciones sobre el racismo. No pretendo tener todas las respuestas. Pero trato de seguir los siguientes puntos generales:

Hable con su hijo sobre el racismo y la discriminación desde que estén pequeños y con frecuencia.

  • No espere hasta que haya un incidente en las noticias o hasta que su hijo experimente racismo para hablar de ello.
  • Sea abierto y honesto.
  • Pregúntele a su hijo qué entiende sobre el racismo.
  • Dele a su hijo la oportunidad de compartir sus sentimientos sin juzgarlo.
  • Use libros y experiencias cotidianas para educar a sus hijos y comenzar la conversación.
  • Exponga a sus hijos a imágenes positivas de personajes racialmente diversos.
  • Fomente la curiosidad en su hijo.

Tener conversaciones difíciles. Si su hijo experimenta racismo de primera mano, es importante (nuevamente) ser abierto y honesto. Es natural querer proteger a nuestros hijos de las desagradables realidades del mundo, pero eso puede hacer más daño que bien.

Comparta sus propias experiencias con el racismo. Comparta cómo sus experiencias lo hicieron sentir y qué hizo (o está haciendo) para superarlas. Sobre todo, recuérdeles a sus hijos que son amados. Recuérdeles que el odio de otra persona no los define. Recuérdeles su dignidad y valor como ser humano. ¡Recuérdeles que son importantes!

Enséñele a su hijo a ser consciente de los prejuicios. Ninguno de nosotros es inmune a los prejuicios. Tómese el tiempo para explicar y discutir los prejuicios con sus hijos y para reflexionar sobre sus propios prejuicios.

Predicar con el ejemplo. Como padres, tenemos la responsabilidad de mostrarles a nuestros hijos cómo actuar y comportarse. Si escucha a sus hijos, o a cualquier otra persona, usar palabras despectivas, aproveche la oportunidad para corregir con tranquilidad cualquier concepto erróneo y explicar por qué los prejuicios son un problema.

Todos tenemos el poder de hacer cambios.

Todos debemos seguir siendo una luz sobre el racismo e inculcar en nuestros hijos lo que significa defender lo que es correcto.

Animo a todos los padres a comprometerse con una conversación continua sobre la raza y el impacto del racismo en nuestro país. Tenemos la gran oportunidad, y la responsabilidad, de criar a la próxima generación para que realice el cambio que deseamos ver.

Con sinceridad y solidaridad,

Marc E. Welsh, MPH
Director de bienestar